NUESTROS GERANIOS DE AGOSTO
APRECIACIÓN CRÍTICA
DE LA POLÍTICA SALVADOREÑA EN LOS ÚLTIMOS DIEZ AÑOS. RECOPILACIÓN DE ALGUNOS
ESCRITOS DE RAMIRO VELASCO. (Tercera Parte)
El año
2014, fue un año electoral en El Salvador. De allí que fuera un año de varios
escritos de tipo político en este blog.
De entre
los escritos publicados, he seleccionado tres y los coloco de nuevo en esta
página, pues aunque puede resultar aburrido para algunos lectores, también
puede ser de interés comparar lo que señalé hace apenas cinco años, con la realidad política actual salvadoreña.
Esto
escribí en diciembre de 2014.
¿TENDRÁ SOLUCIÓN
LA POLARIZACIÓN POLÍTICA EN EL SALVADOR?
Desde 1997, cuando el
FMLN inicia la curva ascendente de votos ganados en las elecciones
legislativas convirtiéndose en una alternativa fuerte para competir con ARENA,
dio inicio también un elevado nivel de polarización política. Tal nivel se vio
agudizado, conforme pasaron las elecciones presidenciales en las que hasta el
2004, el FMLN sufrió fuertes derrotas electorales; pero que cambió de signo en
el 2009, al ganar el FMLN su primera elección presidencial con un poco más de
dos puntos porcentuales frente al Partido ARENA; y alcanzó su máximo nivel al
competir los dos partidos en las elecciones presidenciales de 2014 y ganar el
FMLN en la segunda vuelta con un resultado muy apretado de 50.11% frente a un
49.89% obtenido por ARENA.
Si la polarización se quedara
en el ámbito eleccionario no sería tanto el problema. Lo serio del caso es que
ha contaminado también el ambiente salvadoreño en lo económico y lo social. Así
en lo económico, buena parte de la gran empresa ha tomado una actitud si no de
bloqueo, de poca iniciativa especialmente en el campo de la inversión privada
nacional tan fundamental para la reactivación económica.
Uno de los indicadores para
comprobar que la economía se encuentra estancada después de varios años de
crisis, es la baja tasa de crecimiento que para el año 2014 se estima en 2.2 %;
y el otro, la baja tasa de inversión extranjera directa que según la
CEPAL, para el 2012 alcanzó la cifra de 516 millones de dólares equivalentes a
un 34% del PIB, logrando en aquel año, al menos un pequeño repunte respecto al
2011.
Como lo citaba Diario El Mundo
en el año 2013, “De acuerdo al Consejo Monetario Centroamericano, El Salvador
es el país que menos crece en la subregión desde el 2006.
Y la Calificadora de Riesgos
Standard and Poor’s (S&P) señaló en el mismo año, que: “La perspectiva
negativa refleja el riesgo de una rebaja si la polarización política sigue
pesando sobre la inversión y el crecimiento del PIB, lo que resulta en una
mayor carga de deuda fiscal y externa”.
Sin embargo, como lo manifestó
el 20 de noviembre pasado, en una entrevista concedida al mismo Diario el
Mundo, el Señor Joydeep Mukherji, analista de la Standard and
Poor’s: “Con las buenas noticias desde afuera, la recuperación y el crecimiento
en EE.UU., menos costo de importación de petróleo, con la firma de Fomilenio y
la aprobación de la ley de asociaciones público-privadas …, tal vez haya una
apertura para implementar algo y crecer un poco mejor que antes…”
Los datos anteriores, dan una
idea de que lo que sucede en la superestructura, en la que se encuentra la
esfera política, para utilizar la terminología marxista, que ha venido
repercutiendo en la estructura económica, en la que se encuentra el
aparato material productivo, las relaciones sociales de producción y las
fuerzas productivas.
Existe en el ambiente
salvadoreño una especie de incertidumbre que incide en el nivel productivo
nacional, propiciada en buena parte, por el manejo político del estado por
parte de los gobiernos anteriores y por la correlación de fuerzas antagónicas
de los dos principales partidos que han hecho muy poco por acercar sus
posiciones y entablar un verdadero diálogo sobre temas de interés nacional como
el rumbo de la economía, de las finanzas públicas, del endeudamiento externo y
de la delincuencia.
La polarización política es
tal que probablemente afecta a un 70 % de la población salvadoreña que de
alguna manera son partidarios o simpatizan con una de las dos principales
fuerzas políticas, el FMLN o ARENA.
Frente a esas tendencias,
quien no apoya decididamente una de tales posiciones ideológicas es tildado de
pertenecer o hacerle el juego al partido contrario, especialmente por los
militantes más recalcitrantes, actitud que lesiona una convivencia más
armoniosa y de respeto por quien piensa diferente.
De ahí que en un país con
tanta división partidaria no quedaría más que plantearse como vía de solución
una tercera vía política que pudiera aglutinar especialmente a la clase media,
a la juventud, a sectores progresistas no radicales y a partidos
nuevos que cumplan con niveles de decencia básicos y apertura democrática.
Construir esa especie de
centro democrático puede parecer totalmente utópico al momento, pero a la
larga, puede significar la solución más viable de mediano y largo plazo para
que las cosas cambien de verdad en El Salvador.
Y en noviembre de 2014,
escribí:
LOS NUEVOS RICOS
DE LA POLÍTICA
En otros escritos nos hemos
referido a los políticos tradicionales salvadoreños que han hecho de la
política su modus vivendi (su manera de vivir), utilizando el trampolín de
los partidos políticos para saltar a la escena nacional y en muchos casos para
quedarse durante gran parte de su vida activa, mas con el interés de ganar buen
dinero e influencia, que con el afán de hacer un buen gobierno y
servir al pueblo.
Y en otros casos, aunque hayan
estado un período relativamente corto en un puesto, siguen montados en la rueda
de caballitos, ocupando nuevos cargos gracias al apoyo incondicional del
partido. De estos casos se pueden señalar nombres de personas que pasaron de
ministros, vice ministros o de presidentes de un ramo a
otro, gracias al apoyo incondicional de la partidocracia y no porque
realmente fueran tan competentes.
Como esto ha sido frecuente en
todos los partidos que tienen varios años de existencia, la primera pregunta
que surge es: ¿cómo es que tales personas logran perpetuarse en los cargos,
habiendo tanto militante con capacidad y méritos que vienen trabajando por años
en la lucha partidaria?. La respuesta parece ser obvia, aquellos políticos de
cuero duro y de cuchara larga, han logrado el poder suficiente para que la
argolla dorada de la cúpula, les considere también como “indispensables”
si no es que ellos mismos son parte de la cúpula partidaria.
La siguiente pregunta es: ¿Y
con base a qué criterio se les mantiene tal nivel de apoyo a estos políticos? Y
la respuesta puede considerar varios elementos, entre los cuales los de mayor
peso pueden ser: la contribución económica que dan al partido; los
méritos para manejar a su criterio el juego del premio, del castigo y del
chantaje entre los militantes; y sobre todo, su astucia para la
negociación de prebendas en favor del partido, especialmente con el gobierno de
turno y con personas de dinero que esperan a cambio, leyes o decisiones políticas
que respondan a sus intereses particulares.
Con tantos años en el poder,
los políticos de cuero duro y cuchara larga aumentan su convicción de que ellos
son indispensables y a la vez caen en lo que ya Lord Acton en el siglo XIX
escribió de manera sabia, que “el poder tiende a corromper y el poder absoluto
corrompe absolutamente”. Eso explica también cómo personas que ya gobernaron y
se aprovecharon de los dineros de la hacienda pública hagan todo lo posible por
volver a la posición que tuvieron antes.
Muchos de los adultos que leen
esta página, han conocido a varios políticos salvadoreños que comenzaron en la
palestra pública con recursos limitados, formando parte de la clase baja o
clase media de nuestra sociedad y que al terminar su mandato salieron
adinerados y con gran influencia social. En todos los casos, tales políticos
aparecieron vinculados a un partido político o a la élite económica que les
proporcionó recursos para ganar una elección. Una vez en el cargo, siguieron la
filosofía de la “bivonada” de la que en salvadoreño como hemos comentado en
otros escritos, parte de aquel principio de aprovecharse al máximo para
“componerse” a costa de los recursos del pueblo.
Y así aquellos que se
movilizaban antes de haber estado en un alto cargo público en carros sencillos, ahora
lo hacen en lujosos vehículos valorados en varias decenas de miles de dólares;
disponen de residencias suntuosas y de grandes propiedades; se volvieron
empresarios exitosos; y llevan una vida opulenta.
Lo que contrasta con personas
que lucharon toda su vida profesional en el ámbito público y llevan una vida
ajustada por el alto costo de la vida y las crecientes necesidades que cubrir.
Políticos aprovechados los ha
habido en los diversos partidos como el PDC, ARENA, PCN y
últimamente el FMLN. Se trata de personas que han ocupado u ocupan elevados
cargos como presidentes de los Órganos de Estado, ministros, vice ministros,
presidentes de entidades autónomas, diputados, alcaldes, etc.
En los últimos años y aún
en días recientes, los medios de comunicación han dado cuenta de nombres de
funcionarios de alto nivel con señalamientos muy concretos sobre
enriquecimiento ilícito o actos de corrupción. Lamentablemente si los casos
sucedieron hace diez años o más, la ley los ampara para no ser investigados y
menos castigados pues ya prescribieron; además en su momento, las instancias de
control y fiscalización del estado fueron incompetentes y muchas veces
cómplices y no cumplieron con su cometido de sancionar a los culpables. Qué
lamentable.
Es más, muchos de aquellos
funcionarios, se escudan ahora en el argumento de que no han sido condenados ni
vencidos en juicio y que por lo tanto, son personas decentes e
intachables.
Sin embargo, algo va cambiando
en el ambiente salvadoreño, especialmente a raíz de la vigencia de
la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública y a la creación del
Tribunal de Ética Gubernamental. Así varios casos salen hoy a la luz pública
para que la sociedad juzgue y para que los servidores públicos que utilicen su
cargo para enriquecerse ilícitamente o para cometer actos de corrupción sean
juzgados y sancionados por sus actuaciones.
Lejos queda la propuesta
idealista de Platón que “deben gobernar los mejores hombres, los más capaces y
virtuosos, aquellos que se han formado y han comprendido en esencia que en el
ejercicio del servicio reside el arte de gobernar y para realizarlo es
necesario estar desprovistos de todo interés, codicia o vanagloria…”
Estamos frente a un año
electoral y los ciudadanos tendremos la responsabilidad de elegir a diputados y
miembros de Concejos Municipales. Ojalá que contribuyamos a elegir a los
candidatos y candidatas que han dado muestras de probidad, de capacidad y de
ética; y a los nuevos por elegir sean mujeres u
hombres, que la población los seleccione si considera que son
idóneos para los cargos y que pueden actuar con honradez y honorabilidad.
Y en julio de 2014,
escribí:
EL ESTADO CADA
VEZ CON MENOS DINERO Y EL NIVEL DE GASTOS NO URGENTES SIGUE IGUAL
De todos es sabido, la
situación caótica de las finanzas públicas en El Salvador. Y es que el estado
ha caído en un gran hoyo fiscal, es decir afronta un elevado déficit de
recursos financieros que no le permiten hacer frente a las necesidades más
urgentes de la Administración pública.
Entre las causas mediatas e
inmediatas de tal situación está: la política desarrollada por los gobernantes
del pasado, de responder a la crisis haciendo caso omiso de ella. Es decir,
haber efectuado presupuestos que no son realistas, puesto que se basaron en
supuestos alegres en cuanto a los ingresos a percibir; haber echado mano del
endeudamiento externo como gaveta fácil y que pagarán otros en el futuro; haber
programado gastos para necesidades que no son las más urgentes y primordiales;
haber autorizado gastos hasta cierto punto suntuarios para altos funcionarios;
y por último, la falta de un acuerdo fiscal que responda a una política
nacional justa para los contribuyentes, que evite la elusión y la evasión, pero
también que asegure el buen manejo de los fondos públicos.
La situación financiera actual
es efecto también del mal manejo de los recursos del erario público, por parte
de gobiernos pasados que repartieron dinero en forma populista con los
denominados subsidios o proyectos sociales, suponiendo que la economía iba a
crecer y por lo tanto, que el fisco contaría con los recursos financieros
necesarios para mantenerlos en el tiempo.
El gobierno del Ex presidente
Saca creó una serie de subsidios a troche y moche y el gobierno del Ex
Presidente Funes (primer gobierno del FMLN) hizo lo mismo.
Además hace apenas algunos
meses y en años recientes, el gobierno anterior realizó una cantidad de gastos
innecesarios como: publicidad desmedida, caravanas de escolta a funcionarios de
alto nivel, viajes al extranjero con grandes comitivas, etc.) en la lógica de
que los recursos estaban disponibles y que podían ser manejados a discreción de
los gobernantes.
La situación del erario
público a la fecha parece ser tan crítica que los mismos salarios de los
empleados de algunas instituciones, corren riesgo de no ser pagados en los
últimos meses del año, de no tomarse las providencias necesarias, lo más pronto
posible. Sólo en el Sector Educación, está pendiente a mediados del año
escolar, la entrega anual del bono educativo a los centros escolares
y el pago a proveedores y contratistas, a los que no se ha cancelado
la entrega de zapatos y uniformes, rubros que fueron tan llevados y traídos
como prioritarios en los pasados meses de la pasada campaña electoral.
Por otra parte, mientras la
gente del pueblo, vive la realidad de “coyol quebrado, coyol comido” pareciera
que en algunas esferas gubernamentales no existe conciencia de la situación
crítica del estado y se gastan fondos del pueblo que fueron presupuestados en
rubros como gastos de representación, celebraciones y viajes al exterior como
si se estuviera en tiempos de bonanza.
Recuérdese que no hace más de
dos años se informó de gastos realizados en obras de arte, regalos y bebidas en
la Asamblea por unos $150,000. Y que los viajes al exterior, la mayor parte de
veces constituyen misiones sin relevancia que son más una justificación para
hacer turismo oficial.
Sobre este último punto, sólo
a modo de ejemplo, recordemos los siguientes datos del año 2012: Diario El
Mundo, relató el 18 de noviembre en un largo artículo “Diputados viajaron en
primera clase este año”, datos como los siguientes:
“En septiembre, el presidente
de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, diputado del FMLN, viajó a
Charlotte, Carolina del Norte, Estados Unidos. Su vuelo costó a la Asamblea
$3,011.31. En esa ocasión, Reyes atendió la invitación del Instituto Nacional
Demócrata para participar en el “Foro Internacional de líderes. En agosto, los
diputados Guillermo Gallegos y Francisco Merino viajaron a Nápoles, Italia, del
28 de agosto al 5 de septiembre. Para comprar sus boletos, la Asamblea erogó
$6,975.09 y $7,648.14. En septiembre, Gallegos y Merino fueron en la misma
misión a Beijing, China, del 7 al 19 de septiembre. Los boletos
costaron $8,665.67 y $9,993.3, respectivamente.
En agosto, Alberto Romero,
viajó a Los Ángeles, California, EEUU, por lo que la Asamblea pagó $1,540. En
septiembre, se fue a Venecia, Italia, bajo un costo de $5,587.73”.
A junio del año 2014, (Ver
reporte de La Prensa)http://www.laprensagrafica.com/2014/07/27/asamblea-ya-gasto-323000-para-pasajes-avion-y-546000-en-viaticos sólo la Asamblea Legislativa ya había
gastado $ 323,000 en concepto de pasajes de avión y $ 546,000 en viáticos al
exterior de los $830,848 programados para el año.
Y de manera más concreta, el
12 de junio pasado, la Prensa Gráfica informaba así: “Una delegación de
diputados salvadoreños, incluyendo un arenero, está de visita oficial en la
República Socialista de Vietnam, donde se reunió con el presidente de la
Asamblea Nacional, el secretario del Partido Comunista y el presidente
vietnamita. Los diputados visitaron al secretario general del Partido Comunista
de Vietnam, NguyenPhuTrong, y al presidente de la República, Truong Tan Sang.
La delegación legislativa está encabezada por el efemelenista Sigfrido Reyes,
presidente legislativo; Lourdes Palacios, del FMLN; Guillermo Gallegos, de
GANA; Rafael Machuca, de CN; Douglas Avilés, de CD; y Mario Marroquín, de
ARENA”.
En el mismo sentido, hace
pocos días, en un diario digital circuló la noticia sobre 3 diputados y 2
técnicos de la Asamblea, de visita en Cataluña España, “para conocer cómo
funciona el sistema de luz solar en una iglesia para ver si se aplica en el
nuevo edificio de la Asamblea Legislativa. Los integrantes de la
comitiva son: Vicente Menjívar (ARENA), Lourdes Palacios (FMLN) y Sandra
Salgado (GANA), además de los técnicos Enrique Menéndez y Walter
González. (Ver noticia completa en: http://www.lapagina.com.sv/nacionales/97630/2014/07/23/Diputados-viajan-a-Cataluna-para-conocer-como-iluminaran-nuevo-edificio-de-la-Asamblea
Y en esta semana pasada, el
Presidente de la Asamblea, hablaba de la visita a Palestina y argumentaba: “Yo
he recibido una invitación de la Autoridad Nacional Palestina e intentaré ir lo
antes posible”, dijo Reyes, quien no aclaró el costo de los viáticos que
generará su viaje a los bolsillos de los contribuyentes. “Espero que diputados
de partidos que tienen un compromiso con la paz y respeto a los derechos
humanos me acompañen” añadió Reyes. (Ver noticia completa en el siguiente
sitio)
Ante la situación crítica de
falta de fondos públicos para las necesidades más importantes, las actuaciones
en instituciones públicas como la Asamblea Legislativa rayan con la desfachatez
e irresponsabilidad. Y es que de acuerdo a la estructura del estado para el
manejo de las finanzas públicas, no existe una institución con la suficiente
independencia como la Presidencia de la República por medio del Ministerio de
Hacienda que pueda revisar los gastos públicos presupuestados en rubros
sensibles como viajes, gastos de representación, publicidad y
otros, antes de su aprobación y denegarlos si es necesario durante
la ejecución presupuestaria de acuerdo a la situación de las finanzas públicas.
Ante tales actuaciones, no nos
queda más a la ciudadanía que protestar enérgicamente, denunciar y castigar al
momento de las elecciones, tanta incongruencia y mal uso de los fondos de todos
los salvadoreños.
No estamos contra los viajes,
como el programado por el Presidente de la Asamblea a Palestina, toda vez que
se hagan con los fondos propios de los interesados en viajar y no con los
fondos del pueblo.
COMENTARIO
FINAL
Me da la
impresión que la baja votación de los Partidos ARENA y FMLN y su reducción
drástica como fuerzas mayoritarias ante la candidatura y gane electoral del
Presidente Nayib Bukele en el 2019, tal vez se explican: por el cansancio de la
población por un lado, ante la excesiva polarización política a la que había
llegado la sociedad salvadoreña y por otro, por la galopante corrupción llevada
a cabo por la clase política salvadoreña.
Si las
anteriores afirmaciones fueran ciertas, nos satisface humildemente, haber
contribuido a poner tales temas en la palestra política en su momento, desde
una perspectiva independiente y lo más objetiva posible.