LAS FLORES "CABELLO DE ANGEL" ANUNCIAN EN LOS CERCOS DE CABAÑAS, QUE LLEGA LA CUARESMA Y PRONTO SERÁ SEMANA SANTA.
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REVUELO POLÍTICO EN EL SALVADOR
A poco menos de un mes para las elecciones de Presidente de la República , el ambiente electoral salvadoreño está que revienta con sucesos como: una actividad hasta el tope en las casas de los partidos, gran publicidad en los medios masivos de comunicación, movilización en las calles, concentraciones en los hoteles, presencia de los candidatos en las fiestas patronales de los pueblos, en las iglesias y hasta relajos en lugares públicos.
En este momento cualquier discurso, gesto o palabra mal dicha por un candidato, y en eso se lleva la palma el candidato arenero, puede servir de tizón de fuego para aprovechar la mala imagen como arma de contracampaña. Debe decirse que el FMLN, como buen alumno en este tipo de eventos electorales, ha aprendido a contraatacar también de esta manera.
Los encargados de campaña por ARENA, han copado la radio y la televisión con mensajes que rayan entre el despotricamiento, la mentira y la calumnia sobre Mauricio Funes (candidato del FMLN). Pero también Mauricio ha comenzado a atacar de manera incisiva allí donde más duele.
Aquello de “una campaña de altura” que firman los candidatos al principio de los eventos electorales, es sólo una plataforma de lanzamiento para dárselas de honestos, cumplidores de la ley, de la moral y de las buenas costumbres.
Nunca como ahora el partido de gobierno y la clase pudiente habían llegado a una especie de “emergencia nacional” para tirar todo lo que esté a su alcance, comenzando por elevadas sumas de dinero para enlodar al contrincante político; y para tratar de salvar a su designado que no sale a flote y que más parece dar patadas de ahogado, en unas aguas para las que no parece tener muchas habilidades.
Si no, veamos el caso del debate propuesto por CNN, al que Rodrigo Ávila (candidato de ARENA) ha evadido con argumentos un poco torpes, pues sabe que haría un papelón. Ante la falta de ideas coherentes en la cabeza y capacidad para el discurso, de nada sirve una carretada de dinero del partido y de los padrinos.
A Mauricio le ha llovido de todo. Comenzando por los groseros “piropos” del director de un matutino, conocido por todos por su línea editorial liberal manchesteriana y defensor de un capitalismo salvaje y por atacar con odio y malacrianza. Y junto a él, una cadena de “escribidores” que más que plantear ideas, logran plasmar su rechazo ante la sola posibilidad de que un candidato de una línea ideológica distinta a la existente, pueda llegar a la casona.
En verdad, se puede decir que en la historia de El Salvador, no se ha registrado un cambio revolucionario de régimen. Pues los hubo de línea conservadora durante la Colonia y primeros decenios del siglo XIX; de corte liberal, desde tiempos de Gerardo Barrios hasta 1932, en apoyo a la burguesía emergente; de tipo militar, desde 1932en apoyo a la oligarquía cafetalera, agroexpotadora e industrial hasta 1979; de cambio transicional, aunque muy sumiso a los intereses de Washington, en la década de los ochenta; y de corte neoliberal, desde 1989 a la fecha.
Acá todavía el término “socialdemócrata” y más todavía “socialista” son palabras tan malas, como lo demuestran los que propugnan mantener el status quo y los que dirigen la campaña del partido de gobierno y de otros partidos ahora desmantelados a propósito, pero que son de derecha o siguen haciéndole el juego a ésta.
Junto a las estrategias que surgen en la etapa más álgida de la campaña presidencial, se han dado en el último mes, las escenas de teatro de los partidos medianos y pequeños. Así el PCN y el PDC retiraron sus candidatos, cosa que ya habían planeado para no desaparecer del mapa político y que utilizaron únicamente como gancho para obtener más votos en las elecciones de Concejos Municipales y Diputados. Esto por supuesto “compadre hablado” con el Partido de Gobierno.
Lástima que en ese juego quedara atrapado el Señor Tomás Chévez, que fungió como candidato a la Presidencia del PCN, creyendo que en su nuevo partido iba encontrar almas buenas como en su iglesia, y pensando que en la política salvadoreña las cosas se hacen con decencia y dignidad. Ahora le ha quedado muy claro al ex candidato que “mal paga el diablo a quien bien le sirve”.
Pero qué bueno que el pueblo sencillo haya podido constatar por medio de las denuncias de Chévez, cómo es que funcionan las cosas en partidos como el referido, en el que un grupito de “vacas sagradas” y otras piezas de colmillo retorcido, hacen siempre su agosto. Y que como en los programas de Chespirito, ante una situación inesperada han aparecido en escena de nuevo, como los grandes salvadores de la derecha unida.
Digamos que la protesta de Chévez le ha significado al PCN un pequeño desgaste, pero que no es mayor cosa, ante la importante cantidad de diputados que obtuvo. Sin embargo, no sería remoto que buena parte del voto evangélico, de votantes que apoyaron a ese candidato presidencial, pudiera trasladarse en beneficio de Funes.
En cuanto al PDC, este partido al menos hizo el show de retiro de candidaturas presidenciales de una manera más decente, en acuerdo con su Candidato Rivas Zamora. Y sobre las adhesiones, ha acontecido lo que era ficha cantada. Líderes importantes del PDC, como Rodolfo Parker y Will Salgado, han terminado dando su apoyo público al Partido Oficial con el que siempre han estado muy vinculados.
Will Salgado experto en teatro de calle, realizó su función y la aprovechó al máximo, para proyectarse ante el pueblo sencillo de San Miguel que en buena parte le ha dado su voto. Lo que no significa que la población migueleña automáticamente votará por Rodrigo Ávila, por más firmas que éste le haya estampado a Will; pues ya se sabe que van destinadas más para efectos de publicidad.
Por el lado de la izquierda ha pasado algo diferente. Las dirigencias, tanto de Cambio Democrático como del minipartido Frente Democrático Revolucionario (FDR), se han partido en dos, otorgando su apoyo al FMLN por un lado y diz que por Arturo Zablah por otro; por no decir claramente en este último caso, que por ARENA. Lo que refleja también un apoyo dividido de la militancia de centro entre los dos grandes partidos.
En resumen, lo que tenía que darse se ha dado, y por fin se acabará este largo episodio de campaña en el que se habla de todo, especialmente de ofertas del Grupo de Ávila hasta de construir decenas de miles de casas y generar más de 100,000 empleos en pura época de crisis.
Sobre esto último, a los indecisos o a las personas que todavía no han madurado su decisión para el día “D”, les recomiendo como hizo Ulises según la Odisea , taparse los oídos para no escuchar los “dulces cantos de sirena”, de los mismos que han gobernado ya por veinte años.
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TÚ ERES MI ESTRELLA
Cuando navego por esos mares
en noches tan turbulentas
y llenas de nubarrones,
te busco en el horizonte
sin saber donde te encuentras.
Y en esos días nublados
a veces tan tempestuosos,
sufro tanto tu ausencia,
que dudo si te habré perdido,
o si te habrás marchado
veloz, hacia el infinito.
Pero al llegar el verano,
en esas noches serenas
te busco en el mismo sitio,
en donde sé que me aguardas
para cumplir nuestra cita.
Entonces, puedo admirarte
tan bella y tan radiante
como siempre;
y te aprisiono
con los brazos extendidos
de mi pensamiento.
Y al darte todo mi amor
se ilumina de nuevo
mi vida plenamente.
Y te repito al oído,
y grito a los cuatro vientos,
que tú eres y serás siempre,
mi adorada estrella.
José Ramiro Velasco
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LOS PERROS DE MI PADRE
No he conocido muchas personas con tal sentido del humor como Gerardo, mi querido padre (QEPD).
Creo que él heredó de sus tíos y primos esa manera de encontrarle el lado chistoso a la vida, aún en circunstancias de pobreza o limitación económica.
Su sobrino, Raúl Jovel Velasco, que murió relativamente muy joven y que era hijo de mi Tía Chabela, arreglaba canciones y las cantaba acompañado de sus tíos músicos de verdad, el Trío Los Joveles de Chunte.
A Gerardo, le escuché muchas “pasadas” y chistes con un velado doble sentido y le oí cantar también unas cuantas canciones que seguramente él las escuchó de jovencito y que formaban parte de una tradición oral en su cantón y en los alrededores de Sensuntepeque. Entre esas canciones puedo citar: “Apártate mujer hechicera” y “Los chillidos de una mona”. Esta última, no muy recomendable para niños en alguna de sus partes y que más tarde escuché en la voz del cantante del pueblo, Misael Ramos.
Gerardo era tan simpático y creativo que se inventaba sus chistes en cuanto había oportunidad. Una de las modalidades más frecuentes para inventar sus chascarrillos era jugando con el doble uso de un vocablo y un perspicaz doble sentido. Recuerdo el caso que nos contó casi en secreto, para que no oyeran las mujeres, de aquel señor desconocido que llegó al pueblo procedente de San Pedro Sula y a quien la señora vendedora muy inocente le pregunta: ¿Oiga Señor y Ud. quién es y de donde viene? Y él le contesta en forma picarona: “Yo soy su leño…, es decir, de Sula.
O aquella otra pasada, que narraba el encuentro de dos personas del pueblo. La mujer vendía pan y el hombre huevos. Y un día se sientan a hacer números de cómo iban las ventas. Ella le dice que el negocio anda muy mal. Pero él le afirma con picardía, que casi está seguro que a ella le queda más en el pan, pues a él casi no le queda nada en los huevos…
Pero volviendo al tema de los perros, cuando éramos niños en el Cantón, conocimos a uno que Gerardo bautizó como “Después”. Su color era blanco y además de fiel, era muy bueno para la caza y murió de vejez. Mi mayor recuerdo de él, fue el día de su entierro, en aquel predio ubicado detrás de la casa que llamábamos La Arada y que era una especie de huerto, con diferentes frutales y hasta un pequeño ojo de agua en el invierno.
Otro perro “emblemático” como dicen algunos políticos, y para nosotros los de casa, tan querido, fue “Secreto”. Aquel era un perro negro carbón que no dejaba en paz a los garrobos, ardillas, tacuazines y hasta gatos de monte que cruzaban por los matorrales frente a la casa, hasta llegar al denominado Cerro de la Cruz , propiedad de Tío Eulalio.
Cuando murió “Secreto” también de vejez, mi padre adquirió otro perro de color barcino que bautizó con el nombre de “Naipe”. Aquel fue también un gran cazador especialmente en “La Montañita ”, propiedad de la familia, donde vivían: mapaches, tepezcuintles, zorrillos, gatos de monte, tacuacines, iguanas, garrobos de gran tamaño, chachas y hasta se decía que víboras...
Cruzar por aquellos caminos para ir de la casa a la Montañita o al otro terreno situado a las orillas del Río Lempa, había que pasar sabanetas, pequeñas quebradas y a veces montes gruesos como les llamaban los campesinos. Hacer aquel camino, sin la compañía de un perro, hubiera sido como ahora para los grandes millonarios o políticos de algún nivel, no llevar un guardaespaldas para la seguridad.
Cuando Gerardo se vino a vivir a Sensuntepeque, a principios de los sesenta, tuvo que dejar a “Naipe” en el Cantón. Sin embargo, no faltó oportunidad en que aquel perro caminara 20 kilómetros y apareciera de pronto en la casa del pueblo. Y sólo regresaba, cuando lo llevaba su nuevo amo un tanto a la fuerza, atado al cuello.
Gerardo no cambió su forma de ser en Sensuntepeque y cuando escuchaba palabras graciosas o que le llamaban la atención, encontraba la oportunidad para inspirarse en un nuevo nombre de un perro. Así a un perrillo negro, lo bautizó con el nombre de “teletón”. Tuvo también una perra a la que le llamaban “Raisa” en plena época de Gorbachov.
Termino acá con un "hasta luego".
