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Soy profesor universitario. Trabajo por el desarrollo de Cabañas, un departamento de El Salvador, muy bello, pero también donde hay mucha pobreza, especialmente en lo educativo y cultural. Soy planificador educativo y trabajé por muchos años como director y coordinador de proyectos sociales. Me considero una persona con una visión amplia que trata de valorar lo positivo de cada quien.

martes, 29 de enero de 2019

INICIA 2019, UN AÑO ENIGMÁTICO




FLORES DE LA ESTACIÓN  SECA EN EL SALVADOR


















OCURRENCIAS DEL MES
1. Dos señoras se pelearon este principio de enero en uno de nuestros pueblos. El motivo fue que la una le golpeó de gravedad el gallo a la otra. Tuvo que intervenir la policía. No sé cuánto dolor hubo de por medio y si el animalito de la señora ofendida sigue vivito y coleando.
2. Mi padre era un hombre sencillo pero muy ocurrente. A veces ponía nombre a los animales, utilizando palabras que estaban de moda. Por ejemplo, cuando salió la primera teletón, le puso así a un perrito negro. Creo que en estos tiempos ya hubiera bautizado a un caballo con el nombre de brexit.
3. La palabra máscara tal vez tenga dos significados etimológicos. Uno, “que es la de mayor precio “ (más cara), y otro, que “es la que agranda la faz” (más cara).
4. Le pidieron que definiera el término periodista en una palabra y él contestó en forma acertada: preguntón.
5. Hay personas que visitan a un amigo sólo cuando lo necesitan, ese amigo no es un verdadero amigo.
6. Éramos diez personas en el consultorio. Todos a excepción de una persona muy mayor, mirábamos el celular. En un momento me dije: -Si esta es la moda en los primeros quince años del siglo XXI ¿qué será dentro de veinte años?. ¿Qué inventarán para la comunicación personal?  Tal vez un celular que se lleva en los lentes para ver también películas en tercera dimensión (3D); o en la muñeca de la mano, como un reloj que se expanda con una pantalla virtual; o quizás algo más sorprendente.
7. La ministra de Medio Ambiente, recomendó en diciembre a la gente, que debido a un posible estrés hídrico, no gasten mucha agua cuando se bañan; pero no le dice nada a ANDA  para que cierre pronto los derrames del vital líquido en toda la ciudad.
8. Hay parque cuscatlán, estadio cuscatlán y plan cuscatlán, todos para mientras se pasa el rato.
9. “Con la misma vara que midiereis seréis medidos”. A aquel candidato que usa los trucos cibernéticos, lo midieron con la herramienta Scribbr. Com  y le descubrieron que su plan había sido plagiado en un 56%. ¿Será cierto?
10. El pueblo sabe que hay dos candidatos con mayor preparación académica. Uno, que tiene años de desempeñar cargos públicos y el otro, que viene del sector privado. Pero los partidos que los sostienen tienen muchos bemoles… ¿Entonces la gente se pregunta por quién votar? La respuesta es que hay que analizar bien, pues uno reparte buena paella a los electores y el otro dicen que dará las cosas casi regaladas, con buenas ofertas en el Día D.
11. Algo que han demostrado los partidos en campaña, es que hay mucha plata en algunos sectores de El Salvador. Ese dinero que se eleva a muchos millones, es el que tanto se necesita para hacer obras para la gente; pero se gasta en publicidad, vehículos llenos de gente, camisetas, vinchas, banderines y hasta dinerito en efectivo para los votantes…
12. Si por llenar calles y plazas en el cierre de la campaña se ganara, ya habría tres ganadores. Pero quizás la clave del gane está en el voto de la mayoría silenciosa, de los que tienen dificultades para caminar, de las persona mayores, de los que se guardan en silencio la decisión por quién van a votar, de esos miles a los que las encuestas llaman “ indecisos”.

13. Un periquito dice que habrá segunda vuelta en las elecciones y que los resultados de los tres partidos mayoritarios serán bastante parejos, este tres de febrero. A ese periquito hay que creerle, pues es de los que hace unos cincuenta años usaban para sacar papelitos de la suerte. 












ELECCIONES CRUCIALES PARA PRESIDENTE EN EL SALVADOR

¿Si las elecciones fueran hoy, por qué partido votaría Usted? Esa frase tan de moda en las encuestas de opinión política, han mantenido a la ciudadanos salvadoreños muy atentos desde hace varios meses.
Pero hacer esa pregunta con meses y aún con semanas de anticipación es una cosa, pero saber los resultados en el llamado Día D (Día de las elecciones) pueden ser otros diez pesos.
Es que este evento electoral es muy diferente a otros. Y la explicación tal vez sea, que en esta oportunidad al menos tres de los candidatos son más competitivos que en otros eventos electorales.  
En los últimos quince años, se trataba de una competencia entre dos maquinarias electorales, ARENA y el FMLN. Ahora el peso, lo dan tres candidatos. Dos de ellos, de los partidos mencionados, con una base territorial muy fuerte y el otro, con un apoyo mayoritario en los medios virtuales.
Entonces ¿cómo explicar lo que las encuestas señalan, que Nayib Bukele ganará y hasta en la primera vuelta?.
Creo que las encuestas tienen algunas limitantes. Una es que se hacen antes de la propia euforia electoral y la otra, la más importante, es el diseño muestral. La muestra, aunque se haya hecho muy bien desde el punto de vista matemático y que haya tomado en cuenta porcentajes de la población votante por grupos de edad, sexo, departamento de residencia, etc.  no considera, porque resulta difícil de cuantificar, otras variables que son muy importantes, como los sectores económico-sociales, que tienen mucho peso en nuestro ambiente. Por ejemplo, el campesinado, los pequeños y medianos empresarios, los grupos religiosos evangélicos y católicos, etc.
De allí que lo que uno constata en la apreciación de la gente de nuestros ambientes sobre la preferencia electoral, parece que no concuerda con lo que los entrevistados dicen a los encuestadores.
Pudiera ser que el gane del Señor Bukele, anunciado por las encuestas, se dé el día de las elecciones; pero si no gana, se estaría reflejando lo que algunos llaman, “lo que dice la realidad”. Ese resultado distinto mostraría por qué las encuestas han fallado, como ha sucedido  ya en elecciones pasadas y en otros países.
Lo que uno percibe en el mundo de las personas de carne y hueso es que hay muchos jóvenes y gente que vive fuera del país que dicen que apoyan al Candidato de GANA, pero muchas de esas personas que en este año cumplieron su edad de votar, no tramitaron su documento único de identidad en el período establecido por la ley. Y de la  gente que está fuera del país, muy pocos han votado ya o lo harán en el día de las elecciones, porque les es materialmente imposible.
Entonces está por verse si las encuestas se cumplen o no. En mi opinión, considero que no.
De todas maneras, existe mucha preocupación en los sectores conservadores, que un candidato con características parecidas a las de Mauricio Funes, muy llevado de sí mismo y hábil para hablar y quejarse de los demás, pero que no muestra solidez en su historia personal en cuanto a ética y moral, llegue a la presidencia.
Considero que la experiencia, con gobernantes pasados, debe hacer reflexionar a los votantes para dar su apoyo al candidato que sea más confiable en su moralidad, como dice la Constitución; que actúe y se rodee de las personas más probas y competentes; y que esté dispuesto a responder a las necesidades e intereses de todos los salvadoreños por encima de los de su ego, de su partido o de grupos de poder.
Sé que el pueblo salvadoreño es muy inteligente y sabio, como lo ha demostrado en el pasado. Pero independientemente del candidato ganador, esperamos que este tres de febrero,  gane la democracia y el bien común de la sociedad salvadoreña. Nos vemos en las urnas.